Diseño Experimental de Fotoprotector Físico (TiO2), Obtenido por el Método de Emulsificación Espontánea, con Apariencia Transparente en la Piel.
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https://doi.org/10.17564/2316-3798.2024v9n3p495-508Publicado
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Derechos de autor 2024 Interfaces Científicas - Saúde e Ambiente

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Resumen
Los efectos de la radiación ultravioleta (RUV) en la piel están influenciados por la intensidad de la fuente, el tiempo de exposición, la longitud de onda de la RUV y la pigmentación de la piel. Las radiaciones solares UVA y UVB llegan a la superficie terrestre, siendo cruciales para la producción de previtamina D3 en la piel humana. La exposición al sol puede provocar eritemas y quemaduras solares (UVB) y fotoenvejecimiento (UVA), además de aumentar el riesgo de cáncer de piel, reconocido como carcinógeno por la IARC. Los tumores malignos de la piel, incluidos el melanoma, el carcinoma de células basales y de células escamosas, son principalmente asociado con la exposición a la radiación ultravioleta. Los casos de melanoma aumentaron significativamente entre 1975 y 2016, lo que indica la importancia de la prevención. Los protectores solares son herramientas fundamentales para prevenir los daños causados por la radiación UV. Hay dos tipos: químicos y físicos. Los químicos absorben la energía ultravioleta, mientras que los físicos reflejan o dispersan la radiación. Sin embargo, los bloqueadores químicos se han relacionado con preocupaciones ambientales y de salud, incluida la toxicidad para los corales y la sospecha de alteración endocrina y carcinogenicidad. Se obtuvieron seis formulaciones (F1, F2, F3, F4, F5 y F6) de protector solar físico utilizando dióxido de titanio micronizado mediante el método de emulsificación espontánea, siendo F5 la formulación más estable. F5 apareció transparente en la piel. La caracterización mostró un diámetro promedio de partícula de 273 ± 4,89 nm y un índice de polidispersidad de 0,25 ± 0,12, demostrando homogeneidad en la formulación y reducida capacidad de agregación. La evaluación del factor de protección solar (SPF) in vitro reveló un valor de SPF - 28, considerado alto por reflejar la radiación UV, atribuido a la presencia de partículas inorgánicas reflectantes y a la menor concentración de dióxido de titanio.